Simon Peters, analista experto en criptoactivos de la plataforma de inversión en multiactivos eToro.
La actualización de Shanghai/Capella -denominada «Shapella»- es la más importante de la red Ethereum (ETH) desde la Fusión del año pasado, y sin duda ha sido recibida con expectativas encontradas.
Ahora que los inversores pueden acceder a sus participaciones de ETH previamente bloqueadas, es muy posible que se produzca una importante actividad de venta en el mercado y que los grandes stakers realicen retiradas. Esto provocó la preocupación de que los precios de ETH se desplomaran, y aunque el precio cayó tras la actualización, desde entonces ha vuelto a subir.
En cualquier caso, los inversores pueden estar tranquilos con el proceso de venta, ya que no es instantáneo. Las ventas se escalonan a lo largo de un periodo de tiempo, en lugar de inundar el mercado al instante. Esto podría permitir que los compradores se emparejen más eficazmente con los vendedores y que prevalezcan unas condiciones comerciales más estables.
Hemos visto subir los precios del Ether y el Bitcoin este año a raíz de una mayor claridad en las perspectivas macroeconómicas. Durante la Fusión del año pasado, las condiciones macroeconómicas prevalecieron sobre la reacción a corto plazo de los inversores a los cambios en la red.
s probable que esto se repita para la Shapella a largo plazo, ya que es probable que los precios sigan subiendo a medida que caiga la inflación y se enfríen las subidas de los tipos de interés. Con la posibilidad de obtener un rendimiento, aprovechar un posible aumento de los precios y ahora la flexibilidad de retirar cualquier ETH apostado, podría convertirse rápidamente en una propuesta apetitosa tanto para los inversores minoristas como para los institucionales.
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