Lale Akoner, la analista Global de Mercados de eToro, toma el pulso en su análisis semanal al comportamiento de bitcoin, cuya cotización ha caído por debajo de los 100.000 dólares, pero que aún no supone el fin de la tendencia. El reciente retroceso del bitcoin y del mercado de criptoactivos en general refleja un proceso de reajuste técnico en un contexto macroeconómico más incierto, más que un cambio estructural en la tendencia.
El retroceso del Bitcoin pone a prueba la convicción del mercado
¿Qué está provocando la caída?
Tras una larga subida, la toma de beneficios y la creciente aversión al riesgo a nivel global desencadenaron una venta masiva. El BTC ha caído por debajo de un soporte clave, su máximo anterior, que se mantuvo durante casi dos años, lo que sugiere que los inversores están reevaluando su tolerancia al riesgo.
¿Qué dicen los indicadores técnicos?
Con el BTC ahora por debajo de su soporte de dos años y de las principales medias móviles (50 y 200 días), las señales de sobreventa podrían no garantizar un rebote inmediato, lo que sugiere que esta fase podría prolongarse antes de que surja un soporte sólido.
Aun así, los fundamentos se mantienen
A pesar del deterioro del sentimiento, los fundamentos en la cadena de bloques se mantienen sólidos: más del 70% de los BTC emitidos siguen generando ganancias y las direcciones con más de 1.000 BTC aumentaron sus posiciones en más de 45 000 BTC la semana pasada, una clara señal de acumulación institucional. Este comportamiento apunta a un mercado en consolidación, más que a una reversión estructural.
Conclusión: La disciplina de riesgo sigue siendo clave. Una caída sostenida por debajo del rango de $89.000 a $90.000 indicaría una ruptura del soporte y un posible cambio hacia una fase bajista más prolongada. Pero si se mantiene el nivel de $95.000, esta corrección podría convertirse en una oportunidad de compra para los inversores a largo plazo.
La niebla, la Reserva Federal y el indicador del miedo
La economía estadounidense se encuentra en una fase de espera y la Reserva Federal mantiene un pie en el freno. Las probabilidades de un recorte de tipos en diciembre han caído a cerca del 53%, una fuerte baja desde la casi certeza que existía antes de la última reunión del FOMC. La cautela de la Reserva Federal subraya el frágil equilibrio entre evitar una política monetaria excesiva y tardar demasiado en flexibilizarla.
Cambio paralelo en la volatilidad: De la calma a la cautela
¿Qué está sucediendo?: La volatilidad se disparó. Cuando el VIX superó los 22 puntos la semana pasada, no se produjo solo un repunte a corto plazo (la reacción habitual de miedo). Toda la curva del VIX se desplazó en paralelo, y todos los vencimientos reflejaron una mayor volatilidad. Esto significa que los operadores no solo están nerviosos por el corto plazo; están incorporando una mayor incertidumbre en general.
¿Qué lo impulsa?: Los fondos de control de volatilidad redujeron su exposición a la renta variable.
Los resultados de Nvidia (noviembre de 2020) tienen a los operadores en vilo.
La liquidez sigue siendo escasa, lo que amplifica los picos intradías de la volatilidad implícita.
¿Por qué es importante?: Un desplazamiento paralelo al alza en la curva del VIX se produce cuando la incertidumbre macroeconómica (como la falta de claridad en la estrategia de la Reserva Federal) coincide con catalizadores del mercado (como los resultados de las grandes empresas).

























